Una mujer chilena identificada como María José Orieta Salazar Galaz interpuso una querella ante la procuradora fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos, en contra de la constructora Grupo Paceo y varios de sus representantes, alegando ser víctima de una estafa que se extendió desde 2020 hasta 2023.
La querella señala a Joan Fernando González, Adela Mota Matos, David Gregorio Negueruela Samaniego, Mónica Monzón y al Grupo Paceo S.R.L. como responsables de haber recibido un total de US$90,913.00 por concepto de adquisición de una villa en la tercera etapa del proyecto West Side Punta Cana. Según el documento, la víctima no recibió la propiedad ni el reembolso de su dinero.
En diciembre de 2021, los desarrolladores alegaron que el proyecto había sido afectado por la pandemia, lo que los obligó a asociarse con inversionistas españoles.
María José logró contactar a Negueruela Samaniego, supuesto representante de dichos inversionistas, quien, según la quereallante, le presentó tres opciones desfavorables:
• Pagar un incremento de US$60,000.00 para adquirir la villa original con un contrato nuevo.
• Firmar un desistimiento para recibir el reembolso tras la venta de la villa.
• Aceptar una propiedad de menor valor, la Villa 4, por un precio de US$240,000.00.
La víctima intentó financiar el proyecto con varias instituciones bancarias, incluyendo Scotiabank, Promerica y la Asociación Cibao (ACAP). Sin embargo, descubrió que los títulos de propiedad del mismo estaban a nombre de terceros, lo que impedía cualquier financiamiento.
Según el abogado de María José, Jean Cristofer Pérez, estas irregularidades demuestran la falta de propiedad legítima del terreno por parte de Grupo Paceo, así como la falsa representación de Negueruela Samaniego como inversionista extranjero, configurando una presunta estafa.
Impacto emocional
María José describió los últimos cuatro años como una “pesadilla”, afirmando que ha sufrido graves problemas de salud emocional y la pérdida de su empleo debido a la situación.
“Lo único que pido es que el Gobierno interceda por mí. República Dominicana es un país que vive del turismo y se verá gravemente afectado por situaciones como esta”, declaró en un video que llegó a la redacción de Diario Libre.
Asimismo, calificó al Grupo Paceo como un conjunto de “delincuentes” y expresó que, aunque el daño psicológico es irreparable, exige la devolución de su dinero.
“Lo único que pido es que me devuelvan mi dinero porque el daño sicológico ya provocado es irreparable”, pidió con la voz entrecortada.
Fuente: Diario Libre
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. Sin embargo, descubrió que los títulos de propiedad del mismo estaban a nombre de terceros, lo que impedía cualquier financiamiento.Según el abogado de María José, Jean Cristofer Pérez, estas irregularidades demuestran la falta de propiedad legítima del terreno por parte de Grupo Paceo, así como la falsa representación de Negueruela Samaniego como inversionista extranjero, configurando una presunta estafa.Impacto emocionalMaría José describió los últimos cuatro años como una “pesadilla”, afirmando que ha sufrido graves problemas de salud emocional y la pérdida de su empleo debido a la situación.“Lo único que pido es que el Gobierno interceda por mí. República Dominicana es un país que vive del turismo y se verá gravemente afectado por situaciones como esta”, declaró en un video que llegó a la redacción de Diario Libre.Asimismo, calificó al Grupo Paceo como un conjunto de “delincuentes” y expresó que, aunque el daño psicológico es irreparable, exige la devolución de su dinero.“Lo único que pido es que me devuelvan mi dinero porque el daño sicológico ya provocado es irreparable”, pidió con la voz entrecortada.){kind=link}