En la actualidad, más y más padres están tomando conciencia de la importancia de brindar una educación sexual a sus hijos. Si no lo hacen, de cualquier manera, los niños aprenderán sobre sexualidad, pero la cuestión es si esa educación será positiva o negativa. Niños que ven televisión o navegan por internet, seguramente recibirán una gran cantidad de antivalores y desinformación en lo que respecta a la sexualidad.
Esta situación se agrava para aquellos que hablan y comprenden el inglés. Los programas de entrevistas de la televisión estadounidense suelen ser muy explícitos y se emiten a cualquier hora. Lo mismo puede decirse de las películas y telenovelas de contenido inapropiado.
Muchos padres consideran que la educación sexual se limita a temas como la menstruación o la anatomía reproductiva, información que los niños pueden encontrar en libros fácilmente. Sin embargo, la educación sexual abarca aspectos más amplios como los roles de género y la feminidad y masculinidad.
Previo a este tiempo, se creía que la educación sexual debía emplearse para controlar el comportamiento sexual de los jóvenes, lo cual es un vestigio de la actitud negativa hacia la sexualidad. Hoy en día sabemos que esta estrategia no funciona. Algunos padres pueden pensar que educar sexualmente a sus hijos consiste en darles ultimátums, pero esto no es efectivo para prevenir situaciones no deseadas.
Es crucial mantener una comunicación abierta y amorosa con los hijos para prevenir embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual. Todos los padres tienen la responsabilidad de educarse sexualmente para guiar a sus hijos de manera adecuada en este tema tan importante. Es fundamental abordar la educación sexual con amor y respeto, evitando el uso de amenazas o insultos.
En la actualidad, vivimos en un mundo donde los riesgos como el VIH, herpes genital, papiloma virus y embarazos no deseados son una realidad para los niños y adolescentes. Por lo tanto, es imperativo que los padres asuman su responsabilidad en educar sexualmente a sus hijos para protegerlos de tales riesgos.
Fuente: Diario Libre
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. Hoy sabemos que esto no funciona. Muchos padres creerán que educar sexualmente es decir a sus hijas que “a la casa no vuelvan si se embarazan”.No quiero decir que esté a favor del embarazo en las adolescentes, pero esa no es la vía para evitarlo. Con esa frase, más bien lo fomentamos. Si queremos evitarlo, hay que mantener una excelente comunicación con ellas y ellos. No olvidemos que solo la Virgen María se embarazó sin tener sexo. Debemos educarlos sexualmente y hablar libremente sobre el tema, en un ambiente de afecto y respeto. Las amenazas y los insultos no sirven para nada.Todo padre y toda madre tiene la obligación de educarse sexualmente, para así educar mejor a sus hijos. Niños y adolescentes no deben vivir en estos tiempos de VIH, herpes genital, papiloma virus, embarazos no deseados (sobre todo, en adolescentes latinas), sin educarse sexualmente. Es una responsabilidad que no podemos evadir. RELACIONADAS Solo para adultos Mandamientos para que una familia funcione (II)){kind=link}