En febrero de 2018, el niño Gabriel Cruz Ramírez, de ocho años, desapareció luego de salir de casa de su abuela para ir a la casa de unos primos. La novia de su padre, Ana Julia Quezada, lo raptó, lo asesinó y escondió su cuerpo. Recientemente, Quezada expresó su interés en participar en un documental desde la cárcel, lo cual ha generado controversia.
La madre de Gabriel, Patricia Ramírez, organizó una concentración para evitar que se haga y transmita un documental sobre el caso de su hijo. Quezada asfixió al niño, ocultó su cadáver, y se hizo pasar por colaboradora en la búsqueda, que se convirtió en la más grande de la historia de España.
Actualmente, Quezada cumple su condena en la cárcel de Brieva, cerca de Madrid, donde fue sentenciada a prisión permanente revisable. Durante el día del crimen, Gabriel desapareció en Las Hortichuelas, una población pequeña sin cámaras de seguridad.
Tras la desaparición de Gabriel, se desplegó un gran dispositivo de búsqueda en el que participaron miles de efectivos. Quezada, la asesina, participó aparentando preocupación, pero fue descubierta por la policía. Finalmente, se encontró el cuerpo de Gabriel en el maletero del coche de Quezada.
Actualmente, la familia de Gabriel busca evitar la grabación y emisión de un documental sobre el caso, invocando el derecho al olvido y la protección del honor de los fallecidos y sus familiares.
Somos EL TESTIGO. Una forma diferente de saber lo que está pasando. Somos noticias, realidades, y todo lo que ocurre entre ambos.
Todo lo vemos, por eso vinimos aquí para contarlo.