En todo Estados Unidos, millones de ciudadanos sufrieron un fin de semana agobiante debido al aumento de las temperaturas, y algunas personas fueron rescatadas de inundaciones en la región centro-norte. Lamentablemente, una persona perdió la vida durante las inundaciones en Dakota del Sur, según lo informado por la gobernadora.
Desde la costa atlántica hasta Maine, pasando por los Grandes Lagos y todo el oeste hasta California, las autoridades advirtieron a la población sobre los peligros de un calor y una humedad extremos.
En las fronteras de Dakota del Sur, Iowa y Minnesota, el nivel del agua aumentó durante varios días. Trece ríos inundaron la zona noroeste de Iowa, provocando evacuaciones de vecindarios enteros y al menos una localidad completa. La población de Spencer, Iowa, tuvo que imponer un toque de queda después de unas inundaciones que superaron el récord establecido en 1953.
La gobernadora Kim Reynolds declaró zona de desastre en 21 condados del norte de Iowa, incluido el condado Sioux. Se observaron escenas desoladoras con calles completamente inundadas, como se pudo ver en un video publicado por el departamento de policía local.
La Guardia Nacional se sumó a las labores de rescate acuático y transporte de medicamentos esenciales que se habían perdido en las inundaciones.
Según la meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional, Donna Dubberke, ciertas áreas del norte de Nebraska, el sureste de Dakota del Sur, el sur de Minnesota y el nordeste de Iowa recibieron ocho veces más lluvia de lo habitual. Pronosticó más lluvias para la próxima semana.
En Dakota del Sur, la gobernadora Kristi Noem declaró el estado de emergencia debido a graves inundaciones en el sureste. Varios tramos de autopistas permanecían cerrados y algunas zonas recibieron una cantidad récord de lluvia en tres días.
Uno de los ríos más afectados fue el Big Sioux, junto con el James y el Vermillion, que alcanzarían su caudal máximo durante la semana. Noem instó a la población a mantenerse alejada de las zonas inundadas debido al poder del agua.
Por otro lado, se esperaban inundaciones moderadas a lo largo del río Missouri. Sin embargo, en otros lugares del país, el calor era la mayor preocupación. Es fundamental que las personas se mantengan hidratadas, especialmente si están al aire libre, ya que el calor y la humedad pueden representar un riesgo para la salud.
Varias ciudades como Washington, D.C., Baltimore y Filadelfia alcanzaron temperaturas récord durante el fin de semana. El año pasado, Estados Unidos experimentó más olas de calor que en cualquier otro año desde 1936, lo que llevó a un aumento en las muertes relacionadas con el calor.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió sobre la posibilidad de tornados en el nordeste, luego de que ocurrieran tornados en Wisconsin que causaron daños, incluso en una antigua iglesia luterana fundada en 1889 en la localidad de Argyle.
Fuente: Diario Libre
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