En el primer día de la edición número 23 del Festival de Coachella, la moda de principios de milenio, como minifaldas, pantalones a la cadera, botas y sombreros vaqueros, y mucho croché, se impuso entre los asistentes. Este año, se espera la presencia de artistas como Lana Del Rey y Peso Pluma.
Las tibias temperaturas en la ciudad desértica de Indio, California, que oscilaron entre 25 y 33 grados Centígrados, impulsaron a los participantes a elegir atuendos frescos, predominando el color blanco y prendas muy cortas como "hot pants".
Lana Del Rey, que no se presentaba en Coachella desde hace diez años, marcó tendencia junto a otros grupos como No Doubt o Tyler, the Creator. Los asistentes al festival coordinaron sus atuendos de acuerdo a la vibra de cada artista, optando por looks blancos para Lana, denim para Tyler, y rojos y negros para Doja Cat.
Coachella es tan popular que los artistas pasan a segundo plano, y muchos asistentes acuden por la experiencia y la diversión, disfrutando de la variedad de géneros musicales presentados en el festival.
El ambiente festivo se vive desde temprano, incluso fuera de las instalaciones del Empire Polo Club, donde se lleva a cabo el evento. Los guardias de seguridad animan a los asistentes y esperan con ansias su turno para disfrutar del festival, incluso planeando conseguir autógrafos de sus artistas favoritos.
El argentino Bizarrap, el dúo francés Justice y la puertorriqueña Young Miko se unen a Lana Del Rey y Peso Pluma en la oferta musical de este viernes en Coachella, que se celebrará los fines de semana del 12 al 14 de abril y del 19 al 21 de este mes.
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