Desde el inicio del conflicto entre Israel y Hamás en octubre, Estados Unidos ha autorizado la venta de armas a su aliado por millones de dólares, en concordancia con la ayuda militar que ha brindado durante años.
Aquí explicamos cómo se lleva a cabo la asistencia militar de Estados Unidos a Israel.
Ventas "de emergencia"
En los últimos seis meses, Estados Unidos ha anunciado dos ventas a Israel bajo el procedimiento de "emergencia", permitiendo el envío directo sin pasar por un proceso en el Congreso que toma 30 días.
A principios de diciembre, se autorizó la venta de 13,981 proyectiles de 120 mm por 106 millones de dólares. Esta munición es utilizada por los tanques de combate Merkava en la Franja de Gaza.
A finales de diciembre, se autorizó otra venta "urgente" de unos 57,000 proyectiles de 155 mm y equipo conexo, por un total de 147.5 millones de dólares, provenientes de existencias del ejército estadounidense.
Las ventas de armas que superan cierto monto deben hacerse públicas en Estados Unidos, a diferencia de las transacciones menores.
Según el Washington Post, la administración de Biden ha aprobado más de 100 ventas militares no públicas desde el inicio del conflicto en octubre, incluyendo muchas municiones de artillería.
Ayuda militar estable
Estas dos ventas "urgentes" se suman a la ayuda regular y gratuita que Estados Unidos brinda a Israel, suministrando parte de su armamento más moderno.
Desde 1948, Washington ha entregado a Israel alrededor de 130,000 millones de dólares, ajustados a unos 300,000 millones debido a la inflación. Israel es el mayor receptor de ayuda exterior estadounidense desde la Segunda Guerra Mundial, según un informe del Congreso.
La ayuda estadounidense principalmente es militar, ascendiendo a más de 3,500 millones de dólares anuales en acuerdos hasta 2028.
Estados Unidos proporciona a Israel acceso a equipos militares avanzados, como el avión de combate F-35, y financia en parte el sistema defensivo "Cúpula de Hierro". La ayuda está condicionada a la compra de equipos a fabricantes estadounidenses.
La ley en Estados Unidos prohíbe suministrar armas a países responsables de violaciones de derechos humanos, algo a considerar dado el alto costo humano del conflicto en Gaza.
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