El huracán Beryl prácticamente no causó daños en la República Dominicana y Haití, siendo el principal impacto el fuerte oleaje en el litoral caribeño. A pesar de algunos problemas con el suministro de luz y agua, la normalidad se ha restablecido en la isla Española.
En el territorio dominicano, cerca de medio millón de personas quedaron sin agua debido a los efectos del ciclón Beryl, que afectó a 57 acueductos en el sur del país, dejando a casi medio millón de usuarios sin servicio según el informe del Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
En Barahona, una de las provincias más afectadas por las lluvias, 66 personas tuvieron que evacuar, y en Boca Chica varios establecimientos de playa sufrieron daños por el fuerte oleaje. Además, miles de personas continúan sin electricidad a causa de los vientos y oleaje de Beryl.
Por otro lado, en Haití los daños fueron mínimos, con algunas calles inundadas en el sureste y varios barcos pesqueros arrastrados por las aguas. A pesar de los escasos daños, se mantiene la alerta naranja en el sur del país y la prohibición de navegar hasta el viernes.
Ambos países han tenido daños menores en comparación con otras islas más devastadas por el paso de Beryl. Se espera que el ciclón afecte a Jamaica y posteriormente a las Islas Caimán y la Península de Yucatán en las próximas horas, con vientos sostenidos de 225 km/h.
Fuente: Diario Libre
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