Tras un largo proceso judicial de 14 años, el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha llegado a un acuerdo con los tribunales de Estados Unidos. En este acuerdo, Assange se declaró culpable de un solo cargo de espionaje por el que cumplió una breve condena, considerándose ya pagada con los cinco años que pasó en una cárcel de alta seguridad en Reino Unido.
El acuerdo se dio luego de los llamados del primer ministro australiano, Anthony Albanese, para la liberación de Assange. A pesar de esto, el gobierno estadounidense no ha emitido comentarios al respecto, a pesar de las constantes solicitudes de la defensa de Assange para que el presidente Biden lo indultara.
Fue la justicia de Estados Unidos la que finalmente negoció con la defensa de Assange, poniendo fin a un caso que llevaba casi 14 años en proceso.
Assange había sido acusado de filtrar más de 700,000 documentos confidenciales sobre las actividades militares y diplomáticas de Estados Unidos en Irak y Afganistán a partir de 2010. Para obtener su libertad, Assange tuvo que admitir su culpabilidad en uno de los 18 cargos en su contra.
“El cargo describe los hechos como haber recibido información de fuentes sobre asuntos de seguridad nacional y publicarla posteriormente. Estados Unidos considera que estos hechos pueden subsumirse en la ley de espionaje de 1917, una ley obsoleta aprobada durante la Primera Guerra Mundial para perseguir espías en territorio estadounidense. Nosotros creemos que fuera de Estados Unidos, recibir información de fuentes legítimas y publicarla cuando demuestra crímenes de guerra no debería considerarse espionaje en ningún caso”, explica Aitor Martínez, uno de los abogados de Assange.
Julian Assange se enfrentaba a una posible condena de hasta 175 años de prisión e incluso la pena de muerte. Ahora regresa a su Australia natal para vivir con su familia.
Fuente: Diario Libre
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