En la ciudad de Rafah, al sur de la Franja de Gaza, los civiles palestinos se encontraban angustiados el lunes cuando Israel comenzó a lanzar octavillas instándolos a evacuar por razones de seguridad antes del inicio de una operación militar limitada.
El ejército israelí solicitó la evacuación de las familias palestinas en el este de Rafah antes de llevar a cabo un asalto terrestre en esta ciudad fronteriza con Egipto.
Residentes de Rafah informaron que al salir a las calles después de una noche aterradora con una docena de ataques aéreos en la ciudad, encontraron octavillas cayendo del cielo ordenándoles evacuar de inmediato.
"El ejército está combatiendo intensamente contra las fuerzas terroristas cercanas a ustedes", se lee en uno de los panfletos distribuidos en el este de Rafah.
"Por su seguridad, evacúen de inmediato hacia las zonas humanitarias ampliadas de al Mawasi", anunciaron, acompañado de un mapa que indica la ubicación en el norte de Rafah.
Osama al Kahlut, de la Media Luna Roja palestina en Gaza, mencionó que las áreas designadas para la evacuación actualmente albergaban alrededor de 250,000 personas, muchas de las cuales ya habían sido desplazadas de otras zonas en la Franja de Gaza.
El proceso de evacuación ha comenzado, pero de forma limitada, afirmaron las autoridades.
Ante la invasión de Rafah, organizaciones de ayuda internacionales expresaron su preocupación por la falta de un plan humanitario creíble y la incertidumbre acerca del destino de los desplazados en medio del conflicto.
La guerra entre Hamás e Israel comenzó el 7 de octubre y ha dejado un alto número de víctimas de ambas partes, principalmente civiles. Las cifras de muertes siguen en aumento a medida que la violencia continúa.
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