El 8 de noviembre en Maracaibo, Venezuela, la policía venezolana rescató a siete ciudadanos dominicanos que se encontraban secuestrados por cuatro personas, las cuales fueron acusadas de trata de personas. Las autoridades no detallaron qué estaban haciendo las víctimas en Venezuela, donde informaron que habían sido retenidas durante 15 días. Es posible que hayan intentado llegar a Estados Unidos pasando por Colombia y cruzando el Tapón del Darién, aunque el número de dominicanos que toman esa ruta ha disminuido de manera constante en los últimos años, según cifras de la autoridad migratoria de Panamá.
Si las víctimas fueron engañadas por traficantes haciéndoles creer que serían sacadas del país de manera ilegal, esto representaría un giro en la tendencia más comúnmente observada, en la que los venezolanos son traficados para ser explotados sexual o laboralmente en el Caribe. La ubicación de Zulia, junto a la frontera con Colombia, ha permitido que las redes de trata de personas en la zona se aprovechen del éxodo continuo de venezolanos, forzando a las víctimas a la explotación sexual.
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