Gregory Adamés, ex empleado de la discoteca Jet Set, presentó pruebas al Ministerio Público que podrían implicar responsabilidad civil y penal de los dueños del establecimiento tras la tragedia ocurrida el 8 de abril de 2025.
Entre las evidencias entregadas se incluye un teléfono con videos y conversaciones con Antonio Espaillat, donde Gregory advertía sobre el riesgo de desplome del techo, lo cual fue ignorado. A pesar de las advertencias, la fiesta se realizó, resultando en la muerte del merenguero Rubby Pérez y 235 personas, además de 180 heridos, incluido Gregory.
Adamés, acompañado de sus abogados, presentó una querella contra Antonio Espaillat, su madre Ana Grecia López, y las empresas Inversiones E y L y Club Jet Set. Las acciones legales contra los propietarios de la discoteca han aumentado a 68, involucrando también al Estado dominicano y a la Alcaldía del Distrito Nacional por presunto incumplimiento de sus obligaciones de seguridad y supervisión.
Las denuncias incluyen cargos de homicidio involuntario y negligencia, señalando problemas estructurales y equipo pesado en el techo como causas del derrumbe.
Los denunciantes exigen que el Ministerio Público inicie acciones contra Espaillat, comenzando con su interrogatorio, para asegurar una investigación objetiva y evitar el descrédito del sistema de justicia. Hasta el momento, no se ha interrogado a Espaillat ni se han iniciado acciones penales en su contra.
Fuente: Listín Diario
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