Miguel A. Marrero, de 53 años, fue sentenciado a 21 años y 6 meses de prisión por disparar a una mujer en la espalda tras un altercado entre sus hijos en 2024. La jueza Wilma A. Lewis dictó la sentencia el 2 de julio, que incluye penas federales y territoriales. En febrero de 2025, Marrero se declaró culpable de varios cargos, incluyendo disparar un arma durante un delito violento y posesión ilegal de un arma, evitando así una posible cadena perpetua.
El incidente ocurrió el 4 de julio de 2024 en St. Croix, Islas Vírgenes de EE. UU., cuando el hijo de Marrero se involucró en una pelea con una menor. La madre de la menor intervino y confrontó a Marrero, quien observaba sin intervenir. Según documentos judiciales, la mujer golpeó a Marrero en la cara, y al intentar huir, él le disparó por la espalda, causándole lesiones graves que requirieron atención médica fuera de la isla. La hija de la mujer también resultó herida en la pierna y el tobillo mientras escapaba. Marrero huyó del lugar tras el incidente.
Marrero ya tenía antecedentes penales por posesión de un arma de fuego, con una condena previa en el Tribunal de Distrito de las Islas Vírgenes en 2000.
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