Farmacard informó que, tras firmar un nuevo contrato con el Seguro Nacional de Salud (Senasa) en febrero de 2025, asumió completamente el riesgo financiero y la responsabilidad de los pagos a las farmacias.
Desde el 1 de abril, implementó controles estrictos para evitar prácticas irregulares en la dispensación de medicamentos. La empresa suspendió temporalmente el servicio de entrega en plazas y parques, permitiendo solo entregas en domicilios o lugares de trabajo, y comenzó a usar tokens de seguridad para autorizar compras, buscando prevenir fraudes.
Farmacard defendió el modelo capitado del contrato, argumentando que ayuda a controlar el gasto, que había aumentado descontroladamente en años recientes. Este modelo transfiere el riesgo financiero a la empresa y promueve la eficiencia y transparencia, corrigiendo fallas del proveedor anterior y ofreciendo a Senasa mayor seguridad presupuestaria.
Sin embargo, la Dirección General de Contrataciones Públicas (DGCP) anuló el contrato con Farmacard mediante la resolución RIC-0109-2025.
Fuente: El Testigo
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