, dos mujeres, Jennifer Kowalski y Cole Macdonald, de 28 y 22 años, llegaron a este concurrido aeropuerto internacional y entraron en la zona donde según su versión había estacionado horas antes el avión utilizado por la cantante estadounidense Taylor Swift, señaló Just Stop Oil.La megaestrella tiene previsto actuar el viernes y el fin de semana en Londres."Jennifer y Cole cortaron la valla en el aeródromo privado de Stansted donde está estacionado el avión de Taylor Swift, exigiendo un tratado de emergencia para acabar con los combustibles fósiles antes 2030", señaló la organización ecologista en X.Aunque los ecologistas afirmaron que el avión de Taylor Swift había aterrizado en Stansted pocas horas antes, la policía de Sussex afirmó que el jet privado de la cantante no estaba en el aeropuerto en el momento del incidente.Una vez que ingresaron en la pista del aeropuerto ubicado al noreste de la capital británica, rociaron dos aviones con bombas de pintura naranja.La policía anunció que las dos activistas fueron arrestadas minutos después de ingresar al lugar.La controvertidas acciones de la organización ecologista, especialmente en museos, competiciones deportivas o espectáculos, suelen conllevar penas de prisión para sus activistas.El miércoles, activistas de esta organización rociaron con pintura los monolitos del famoso yacimiento prehistórico inglés de Stonehenge.La policía de Wiltshire arrestó a dos personas y la acción fue condenada por políticos británicos de todas las vertientes, entre ellos el primer ministro conservador Rishi Sunak y su rival laborista Keir Starmer.En un comunicado de Just Stop Oil, uno de los activistas detenidos el jueves criticó "a los multimillonarios que viven en el lujo y tienen medios para volar en jets privados, sin preocuparse por las condiciones de vida" de millones de personas afectadas por las consecuencias de la crisis climática."Los pasajeros que utilizan aviones privados son responsables de catorce veces más emisiones de dióxido de carbono que los de un vuelo comercial", añadió el grupo ecologista. RELACIONADAS Europa Dos ecologistas detenidos tras rociar con pintura naranja el monumento de Stonehenge Resto del mundo Dos ecologistas detenidos tras romper el cristal de una pintura de Velázquez en Londres){kind=link}
El jueves, dos miembros de la organización ecologista Just Stop Oil ingresaron a la pista del aeropuerto de Stansted, cerca de Londres, y rociaron jets privados con pintura naranja antes de ser detenidos, según informaron la policía y la organización ambiental.
A las cinco de la mañana, las activistas Jennifer Kowalski y Cole Macdonald, de 28 y 22 años respectivamente, llegaron al concurrido aeropuerto internacional. Según Just Stop Oil, entraron en la zona donde supuestamente había estacionado el avión utilizado por la cantante Taylor Swift, quien tiene programadas actuaciones en Londres este fin de semana.
Las activistas cortaron la valla del aeródromo privado de Stansted donde estaba estacionado el avión de Taylor Swift, exigiendo medidas urgentes para acabar con los combustibles fósiles antes de 2030, según la organización ecologista.
Aunque afirmaron que el avión de Taylor Swift había aterrizado en Stansted pocas horas antes, la policía de Sussex confirmó que el jet privado de la cantante no estaba en el aeropuerto en el momento del incidente.
Tras rociar con bombas de pintura naranja dos aviones en la pista del aeropuerto, las activistas fueron arrestadas minutos después por la policía.
Las acciones controvertidas de Just Stop Oil, que incluyen vandalismos en diferentes lugares como museos, eventos deportivos y espectáculos, suelen llevar a penas de prisión para sus activistas. Recientemente, dos personas fueron arrestadas por rociar con pintura los monolitos de Stonehenge, lo cual fue condenado por políticos británicos de distintas tendencias.
En un comunicado, una de las activistas detenidas expresó críticas hacia los multimillonarios que utilizan jets privados sin preocuparse por las consecuencias de la crisis climática. Según Just Stop Oil, los pasajeros de aviones privados generan catorce veces más emisiones de dióxido de carbono que los vuelos comerciales.
Fuente: Diario Libre
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