En el primer trimestre del año, el crecimiento económico de la eurozona superó las expectativas al aumentar un 0.3% en comparación con el trimestre anterior, según Eurostat. Los analistas de Bloomberg y FactSet esperaban en promedio un crecimiento del 0.1% en los primeros tres meses del año. Anteriormente, el Producto Interior Bruto (PIB) había disminuido un 0.1% en los dos trimestres anteriores.
La inflación se mantuvo estable en abril en un 2.4% interanual en los 20 países que comparten la moneda única, cumpliendo con las previsiones de los analistas. Este incremento se acerca al objetivo del 2% del Banco Central Europeo (BCE), lo que podría resultar en una reducción de las tasas de interés. De hecho, es muy probable que el BCE disminuya las tasas en junio, según declaraciones recientes de sus dirigentes.
Inflación subyacente
La inflación subyacente, que excluye los precios volátiles de la energía y la alimentación, continuó disminuyendo a un 2.7% en abril, luego de estar en 2.9% en marzo. La subida de los precios del consumo en la zona euro se ha reducido drásticamente desde el récord del 10.6% interanual en octubre de 2022, cuando hubo un aumento significativo debido a la guerra en Ucrania.
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