En Texas, las fuertes inundaciones causadas por lluvias torrenciales han dejado al menos 43 muertos, incluidos 28 adultos y 15 niños, en el condado de Kerr. Además, 27 niñas que asistían a un campamento de verano cristiano cerca del río Guadalupe están desaparecidas. Las lluvias comenzaron el viernes y continuaron con menor intensidad durante la noche y madrugada del sábado. El campamento quedó devastado, con autos varados y cabañas dañadas.
Michael, un padre que viajó desde Austin, buscó a su hija de 8 años en el lugar. Equipos de rescate, incluyendo 500 rescatistas y 14 helicópteros, están trabajando en la búsqueda de las niñas desaparecidas. El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha solicitado recursos federales adicionales y ha ampliado la declaración de estado de desastre. El presidente Donald Trump y la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, están al tanto de la situación.
El río Guadalupe creció ocho metros en 45 minutos, y se registraron más de 300 milímetros de lluvia, lo que equivale a un tercio de las precipitaciones anuales promedio. Las inundaciones repentinas no son inusuales en la región, pero los científicos advierten que el cambio climático está aumentando la frecuencia e intensidad de estos eventos extremos.
Fuente: Listín Diario
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