La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, declaró hoy que la eurozona está en una fase avanzada de la desinflación, pero advirtió que todavía hay una gran cantidad de incertidumbre respecto al futuro.
"Ya hemos avanzado bastante en el proceso de desinflación y estamos experimentando una recuperación lenta que inició en el primer trimestre y que esperamos se mantenga, pero existen dudas y grandes interrogantes sobre lo que nos depara el futuro", mencionó durante el panel de política monetaria del evento anual organizado por el BCE en Sintra (Portugal).
Lagarde, participando en un panel con el presidente de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, Jerome Powell, y el presidente del Banco Central de Brasil, Roberto Campos Neto, destacó que la tasa de inflación en la eurozona, que disminuyó al 2.5 % en junio, es positiva, pero también señaló que el camino será "accidentado" hasta finales de 2024.
El BCE mantiene la proyección de que la eurozona logrará alcanzar la meta del 2 % de inflación para finales de 2025, y Lagarde expresó su confianza en que, en un año, el indicador estará solo algunas décimas por encima de la meta establecida.
A pesar de esto, se abstuvo de adelantar los próximos pasos en su política monetaria, luego de reducir los tipos en junio por primera vez desde 2016: "Es necesario analizar en detalle la situación económica y evaluar cuál será nuestra respuesta y cómo debemos proceder", puntualizó.
La máxima autoridad del BCE mencionó que la estrategia seguida hasta ahora "no ha sido un proceso lineal ni un camino predeterminado", y enfatizó que las decisiones futuras se basarán en más investigación y más información.
También afirmó que no es imprescindible que la inflación en el sector servicios llegue al 2 %, ya que el aumento de precios de los productos manufacturados se encuentra por debajo de ese nivel, por lo que al final habrá un "equilibrio".
Como ya había expresado en su discurso inicial del evento el lunes, la "suave transición" de la economía no está garantizada.
Impacto de las elecciones
Al ser cuestionada sobre cómo podrían afectar a la eurozona las elecciones en Francia y Reino Unido, Lagarde declinó hacer comentarios sobre la situación política.
"Sin embargo, el BCE debe seguir cumpliendo con su deber. Nuestro mandato es la estabilidad de precios, la cual depende de la estabilidad financiera. Estamos vigilantes porque es parte de nuestro trabajo y continuaremos haciéndolo", afirmó.
El foro del BCE reúne anualmente en Sintra a gobernadores de bancos centrales, académicos y representantes del sector financiero para discutir temas relacionados con la política monetaria, similar a lo que hace la Reserva Federal de Estados Unidos desde 1978 en Jackson Hole.
En esta edición, que comenzó el lunes y se extenderá hasta el miércoles, se abordarán temas como la evolución pasada, presente y futura de la inflación, los impactos geopolíticos en los precios, los ciclos de la política monetaria y la productividad en la zona euro.
Fuente: Diario Libre
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