Miriam Germán Brito defendió su labor como procuradora general de la República y su extensa experiencia en la judicatura frente a las críticas recibidas, argumentando que no se puede buscar la aprobación general al administrar justicia.
En una reunión con los directivos de distintos medios de comunicación, aseguró que nunca limitaría la libertad de expresión y respondió a las críticas sobre la estrategia del Ministerio Público que ha involucrado acuerdos con varios imputados.
Junta a la coordinadora de Litigación de la Procuraduría de Persecución a la Corrupción Administrativa (Pepca), Mirna Ortiz, afirmó que estos acuerdos tienen base legal y buscan fortalecer las acusaciones contra los principales señalados en los expedientes.
Afirmó que no se ha negociado la impunidad y desmintió los rumores sobre acuerdos indebidos en la Procuraduría General. También se refirió a la importancia del escrutinio sobre los funcionarios, aunque señaló la necesidad de respetar el derecho al honor y la intimidad.
Las tres causales y decisiones personales
En la reunión, Miriam Germán habló sobre su vida personal, incluyendo la condición especial de su hijo, y expresó estar de acuerdo con las tres causales para actuar en función de sus convicciones religiosas. Admitió que consideraría otra posición, pero lo pensaría detenidamente debido a su hijo.
La procuradora general de la República rechaza las críticas sobre supuestos favorecimientos a dirigentes de la oposición, recordando que también se han condenado legisladores del partido oficialista durante su gestión. Explicó que las investigaciones no son inmediatas, pero se han desarrollado con diligencia.
Fuente: Diario Libre
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