Al parecer, las cosas cambian rápidamente en el mundo del teléfono Trump. Han pasado 10 días desde que la Organización Trump anunció que lanzaría el smartphone T1 de 499 dólares, y en ese tiempo ya ha habido una confusa serie de cambios, en un producto que inicialmente se suponía que llegaría tan pronto como en agosto. Llegaría.
Ahora, solo se puede esperar para "finales de este año", según la actualización más reciente del sitio web de Trump Mobile, y ya no se menciona "próximamente". No es el único cambio. Los detalles básicos del teléfono también parecen ser algo transitorios, hasta el punto de que por el momento es un misterio qué es exactamente lo que llegaría a tu puerta si hicieras hoy el pedido anticipado de 100 dólares.
¿Hecho en… dónde?
El cambio más notable es el giro, no del todo inesperado, de un teléfono que, según el comunicado de prensa, estaría "diseñado y fabricado en Estados Unidos" a uno que "se hace realidad" en Estados Unidos, con "valores estadounidenses en mente" y con "manos estadounidenses detrás de cada dispositivo". Qué vaguedad tan conveniente.
Eric Trump ya había intentado retractarse de las afirmaciones sobre la fabricación estadounidense durante las entrevistas del primer día del anuncio, afirmando que se trataba de una mera aspiración, algo que podría ocurrir "con el tiempo". Ahora parece que el sitio web también lo ha admitido, aunque un empleado del servicio de atención al cliente de Trump Mobile sostuvo la afirmación original, declarando a WIRED: "Aún no tenemos el nombre del fabricante, pero se fabricará aquí, en Estados Unidos".
Las especificaciones reales del teléfono también han cambiado misteriosamente, casi como si el teléfono que se anunció por primera vez fuera más una lista de características deseadas que un modelo de producción cerrado. El T1 ya no tiene una pantalla de 6.78 pulgadas, sino una de 6.25 pulgadas, y ahora no se prometen 12 GB de RAM, ni se mencionan en absoluto.
También ha habido algunas correcciones técnicas muy necesarias: ya no tiene una "cámara de larga duración de 5,000 mAh", sino una "batería de 5,000 mAh", y el T1 ha recibido el superíndice legal correcto, pasando de una marca de servicio "SM" a una marca comercial "TM". Además, por suerte, la extraña promesa de "cámaras frontales" se ha calificado ahora como una sola "cámara frontal".
Y no es solo el teléfono en sí el que ha visto cambios. El mapa de cobertura del servicio inalámbrico de Trump Mobile (había sido tomado prestado de un proveedor de servicios de telefonía móvil llamado Ultra Mobile y hacía referencia al Golfo de México) ha cambiado y ahora muestra la nomenclatura "Golfo de América", preferida por Donald Trump.
Se ha aclarado que el precio relativamente barato de 499 dólares del teléfono inteligente requiere una suscripción continua a Trump Mobile. ("Reconoces que hoy se te cobrarán 100 dólares por tu primer mes de servicio de Trump Mobile y los gastos de envío y activación. También autorizas un cargo de 399 dólares más el impuesto de ventas que se cobrará en el momento en que se envíe tu teléfono T1″). También se han añadido algunas protecciones de responsabilidad adicionales en el pie de página legal, sobre todo en torno a los servicios de terceros ofrecidos en el T1.
Por ahora, el teléfono inteligente T1 parece estar en pleno proceso de desarrollo. Queda por ver si alguna vez saldrá de los pedidos anticipados y en qué forma se materializará, si es que lo hace. La semana pasada ya teníamos preguntas. En todo caso, ahora tenemos aún más.
Artículo originalmente publicado en WIRED. Adaptado por Mauricio Serfatty Godoy.
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