Cuba ha negado cualquier conexión con el narcotráfico y ha destacado su cooperación con Estados Unidos en este tema, basada en un acuerdo bilateral de 2016. En una rueda de prensa, funcionarios del Ministerio del Interior y de Justicia de Cuba reafirmaron que el país no produce ni es un punto de tránsito de drogas, manteniendo una política de "tolerancia cero".
El coronel Juan Carlos Poey expresó que el despliegue militar de EE.UU. en el Caribe, cerca de Venezuela, es visto como una amenaza para la seguridad de Cuba. Poey señaló que las drogas sintéticas, principalmente provenientes de Estados Unidos, son las más comunes en la isla.
El primer coronel Ybey Carballo, del Estado Mayor de las Tropas Guardafronteras, mencionó que Cuba comparte información de inteligencia con EE.UU., proporcionando detalles sobre embarcaciones sospechosas. Hasta ahora, Cuba ha incautado más de dos toneladas de drogas este año. Las autoridades han mostrado preocupación por el aumento del consumo de drogas, especialmente entre los jóvenes, aunque no se han publicado estadísticas completas.
Se han llevado a cabo juicios con condenas severas por tráfico de drogas, con un enfoque preventivo para evitar que Cuba se convierta en un país productor o de tránsito.
Mientras tanto, EE.UU. ha mantenido un despliegue naval y aéreo en el Caribe desde septiembre, acusando al presidente venezolano Nicolás Maduro de estar vinculado con el narcotráfico. Cuba, aliada de Venezuela, ha rechazado lo que considera pretextos de EE.UU. para una posible agresión militar contra Venezuela.
Fuente: El Testigo
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