Antes de emitir la sentencia condenatoria contra Alison de Jesús Pérez Mejía (Chiquito), Wesley Vicent Carmona (el Dotolcito) y Luis Brito Troncoso (Luisito) por el asalto a mano armada que resultó en la muerte de Joshua Fernández, la jueza Yissell Soto, en representación del Segundo Tribunal Colegiado, instó a los padres a supervisar las actividades de sus hijos para evitar que se involucren en actividades delictivas.
La jueza enfatizó la gravedad del crimen cometido contra Joshua Fernández, quien falleció dentro de un automóvil mientras regresaba a casa después de celebrar su cumpleaños en la discoteca Kiss Bar, sin sospechar que perdería la vida en un asalto a mano armada.
La magistrada calificó el suceso como atroz, destacando que el crimen fue planificado y causó un gran daño tanto a nivel individual como a la sociedad en su conjunto.
Soto expresó que todos se vieron afectados por este hecho, desde la sociedad en general hasta las víctimas, que perdieron a un joven activo y estudiante. Asimismo, destacó la necesidad de una profunda reflexión social sobre los errores cometidos por los jóvenes acusados.
Tras revisar las pruebas presentadas, las juezas llegaron a un veredicto unánime y declararon a Alison de Jesús Pérez Mejía (Chiquito) culpable de homicidio voluntario, robo agravado y tenencia ilegal de arma, imponiendo una condena de 30 años de prisión. Luis Brito Troncoso (Luisito) fue sentenciado a 20 años por robo agravado, posesión de arma ilegal y asociación de malhechores, mientras que Wesley Vicent Carmona (el Dotolcito) recibió una condena de 15 años por robo agravado y asociación de malhechores.
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