La Organización Mundial de la Salud informa que aproximadamente uno de cada tres adultos en todo el mundo padece de presión arterial alta. Esta condición, también conocida como hipertensión, puede causar derrames cerebrales, ataques cardíacos, insuficiencia cardíaca, daño renal y otros problemas de salud si no se trata adecuadamente.
El Dr. Luke Laffin, experto de la Clínica Cleveland, afirma que simples cambios en el estilo de vida pueden ser efectivos para reducir la presión arterial. Según él, la gestión de la presión arterial depende en un 70% del estilo de vida y en un 30% de la medicación. Es importante combinar ambos enfoques para un tratamiento efectivo.
Cinco modificaciones en el estilo de vida pueden tener un gran impacto en la reducción de la presión arterial sistólica, la cual idealmente debería ser de 120 mmHg o menos. Factores como el tabaquismo, el estrés, la falta de sueño y el consumo de alcohol también contribuyen al aumento de la presión arterial y deben ser evitados.
1. Comer menos sal
Reducir la ingesta de sal es crucial para disminuir la presión arterial alta. Estudios indican que una dieta baja en sodio puede tener un efecto similar al de uno o dos medicamentos para la presión arterial. Se recomienda no consumir más de 1,500 mg de sal al día, aunque algunos establecen el límite en 2,300 mg. Es importante leer las etiquetas de los alimentos, ya que el sodio está presente en muchos de ellos.
Reducir la ingesta de sodio de 3,500 mg a 2,300 mg puede disminuir la presión arterial en 2-3 mmHg, mientras que limitar la ingesta a 1,500 mg al día puede reducirla en 5-6 mmHg.
2. Consume más potasio
El potasio puede ayudar a reducir la presión arterial al ayudar a los riñones a eliminar el exceso de sodio. Se recomienda consumir entre 3,000 y 3,500 mg de potasio al día mediante alimentos como plátanos, tomates, aguacates, entre otros. Pacientes con enfermedad renal deben tener precaución con el consumo de potasio en exceso.
Aumentar la ingesta de potasio a niveles recomendados puede reducir la presión arterial en 4-5 mmHg en personas con hipertensión y riñones sanos.
3. Adopta la dieta DASH
La dieta DASH, enfocada en detener la hipertensión, es una dieta equilibrada rica en frutas, verduras y cereales integrales que puede ayudar a reducir la presión arterial. Seguir esta dieta puede resultar en una reducción significativa de la presión arterial en poco tiempo.
Seguir la dieta DASH puede reducir la presión sistólica hasta 11 mmHg en unas pocas semanas.
4. Ponte en forma
Realizar actividad física regularmente, especialmente aeróbica, es eficaz para reducir la presión arterial. Ejercicios de resistencia dinámica e isométrica también pueden ser beneficiosos para reducir la presión arterial.
Hacer 150 minutos de actividad aeróbica a la semana puede reducir la presión arterial en 5-8 mmHg, mientras que los ejercicios de resistencia dinámica pueden disminuirla en 4-5 mmHg.
5. Alcanza un peso saludable
El aumento de peso se relaciona con un incremento en la presión arterial, y perder incluso unos pocos kilogramos puede tener un efecto significativo en la reducción de la presión arterial sistólica. Cada pérdida de 1 kg debe resultar en una caída de 1 mmHg en la presión arterial.
Remedios de la naturaleza
- El chocolate oscuro y el cacao en polvo pueden ayudar a relajar los vasos sanguíneos y reducir la presión arterial.
- Las bayas, ricas en polifenoles, pueden contribuir a bajar la presión arterial y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
- Las dietas ricas en calcio están asociadas con niveles saludables de presión arterial. Se puede obtener calcio de vegetales de hoja verde oscura, tofu y lácteos.
- Un jugo de limón, miel y jengibre en ayunas puede ayudar a limpiar la sangre y reducir la presión arterial.
- El vinagre de manzana puede equilibrar el pH de la sangre y evitar la acidificación que aumenta la presión arterial.
- Beber jugo de tomate puede beneficiar la salud del corazón y reducir la presión arterial y el colesterol LDL.
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