En estos tiempos, caracterizados por los frecuentes cambios de temperatura, junto con la llegada del polvo del Sahara, las complicaciones respiratorias tienden a empeorar y aumenta la hiperreactividad bronquial.
Según Magdelyne Ceballos, neumóloga internista en la Clínica Abreu, el virus de la influenza tipo A es el más común, causando fiebre y tos persistente. Además, la experta ha observado un aumento en los casos de COVID-19, influenza B y virus sincitial, este último afectando principalmente a los niños.
“La influenza tipo A es la más frecuente y también la más mortal, pero la mayoría de los pacientes puede ser tratada de forma ambulatoria”, afirmó Ceballos.
Ceballos explicó que los pacientes que requieren hospitalización y cuidados intensivos suelen ser aquellos con enfermedades preexistentes como diabetes, hipertensión, asma y enfermedades pulmonares.
“Aunque hay menos casos de COVID-19 comparado con la influenza tipo A, todavía estamos viendo incidencia de Covid. También hay influenza B y un aumento en los casos de alergias como asma, rinitis y sinusitis”, agregó.
Ceballos instó a los pacientes a buscar ayuda médica temprana, ya que muchos llegan con tos persistente por 15 o 30 días, ya con un cuadro avanzado de neumonía.
Virus en niños
La neumóloga recomendó prestar especial atención a los niños, ya que son más susceptibles a estas infecciones.
Ceballos recordó que los cambios de clima debilitan las defensas, por lo que es importante abrigar bien a los niños, mantenerlos secos en la lluvia y proporcionarles una alimentación adecuada para mantener su salud.
“El sincitial respiratorio no afecta tanto a los adultos, pero sí a los niños, por lo que es importante prestar atención a esta afección viral y a la influenza en los más pequeños”, enfatizó.
Medidas básicas de higiene
Como medidas básicas, la doctora recomendó un distanciamiento leve en caso de que haya una persona enferma en casa, lavado constante de manos y evitar tocarse las mucosas con las manos sucias. Respecto al uso de mascarillas, dejó esa decisión en manos de cada individuo.
“Las infecciones virales pueden permanecer en las superficies, por lo que es importante no tocar las mucosas de los ojos, nariz y boca con las manos para evitar introducir el virus en nuestro organismo”, advirtió.
Vacuna
Dado que es una enfermedad estacional, la vacuna contra la influenza se actualiza cada año, siendo septiembre y octubre los meses de inicio de una nueva temporada. Se espera que este año la vacuna sea trivalente y ofrezca mayor protección contra las nuevas cepas.
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