, miras a Caitlin Clark, miras a Paige (Bueckers), miras a la joven que está en el estado de Iowa, la estudiante de primer año allí (Audi Crooks), miras en (Cameron) Brink, creo que es su apellido, en Stanford. Y eso es sólo por nombrar algunas: la estudiante de primer año que está en Notre Dame (Hannah Hidalgo)”.Aunque James mencionó a jugadores masculinos conocidos como Zach Edey, de Purdue y Dalton Knecht, de Tennessee, señaló que el portal de transferencias y las salidas tempranas del draft de la NBA hacen que sea más difícil para los jugadores familiarizarse con los fanáticos. Es diferente por el lado de las mujeres.“Puedes construir un legado realmente icónico en un programa”, dijo James. "Eso es lo que a todos nos encanta".Cuando Clark e Iowa vencieron a Reese y LSU en la final regional el lunes por la noche, fue el partido de baloncesto universitario femenino más visto jamás registrado. Según Nielsen, promedió 12,3 millones de espectadores en ESPN, superando todos menos uno de los cinco partidos de las Finales de la NBA del año pasado, junto con el último partido de la Serie Mundial del año pasado.){kind=link}
LeBron James opina que la creciente popularidad del torneo de baloncesto femenino de la NCAA se debe a la presencia de estrellas reconocibles en el juego.
Según James, no hay mucha diferencia entre el juego masculino y femenino en el baloncesto universitario, pero la popularidad ha aumentado gracias a los íconos que destacan en el juego femenino. Entre las jugadoras mencionadas por James se encuentran Angel Reese, JuJu Watkins, Caitlin Clark, Paige Bueckers, Audi Crooks, y Cameron Brink, entre otras.
A diferencia del juego masculino, donde las transferencias y las salidas tempranas al draft de la NBA dificultan que los jugadores se vuelvan conocidos para los fanáticos, en el baloncesto femenino se puede construir un legado icónico en un programa, lo cual es muy apreciado por los aficionados.
El partido entre Clark e Iowa contra Reese y LSU, que tuvo lugar el lunes por la noche, se convirtió en el partido de baloncesto universitario femenino más visto de la historia, con una audiencia promedio de 12,3 millones de espectadores en ESPN, superando la audiencia de la mayoría de los partidos de las Finales de la NBA y el último partido de la Serie Mundial del año pasado, según Nielsen.
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