La Fiscalía española ha solicitado el archivo de la causa judicial contra Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez, argumentando que su relación conyugal con el mandatario no es suficiente para acusarla de tráfico de influencias.
Gómez está siendo investigada por un presunto delito de malversación relacionado con el nombramiento de su asesora en 2018 y por supuestamente haber influido en la adjudicación de contratos públicos al empresario Juan Carlos Barrabés.
Durante una audiencia, la Fiscalía descartó indicios de los delitos investigados: tráfico de influencias, corrupción en los negocios, intrusismo y apropiación indebida. Según el Ministerio Público, no hay pruebas de que Gómez haya obtenido un beneficio económico por su relación con el presidente.
El juez Juan Carlos Peinado investiga si Gómez favoreció a las empresas de Barrabés para obtener contratos públicos y su papel en la cátedra que codirigía en la Universidad Complutense de Madrid.
La Fiscalía sostiene que no hay evidencia de que Gómez haya ejercido influencia indebida o recibido sobornos.
Este caso, junto con el procesamiento del hermano de Sánchez, ha sido criticado por la oposición conservadora, mientras que el partido socialista y otros partidos de izquierda lo consideran poco consistente y acusan a los jueces de politizar el asunto.
Fuente: El Testigo
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