El terrorista es aquel que infringe terror a la sociedad a través de distintos mecanismos, motivados fundamentalmente por fines religiosos, políticos e ideológicos. Con ese concepto claro pasamos a hablar de los grupos armados haitianos, los cuales más que pandilleros que realizan actividades delictivas con fines lucrativos. Son directamente terroristas, de acuerdo con el concepto. Limitarlos al adjetivo de "pandilleros” es subestimarlos.
No hace mucho el presidente Luis Abinader los declaró como grupos terroristas bajo un alegato muy cercano a que los delincuentes tenían demasiado poder para ser simples pandilleros y sus acciones eran desafiantes –lo cual encaja con la definición de terroristas–; pero en realidad la motivación de Abinader al concederle ese estatus fue de carácter jurídico, ya que de esa manera si ingresan al país, el estado dominicano puede darle un trato menos afable, limitando de esa manera –al menos en el papel– el paso de esos antisociales por nuestras fronteras, implantando una especie de temor. Sin embargo no se puede esperar miedo de gente que literalmente vive en un campo de batalla, similar al de una guerra, en el contexto de un país anarquista.
El argumento de Abinader fue casi que metafórico, aunque es innegable que desde el punto de vista técnico, los grupos bélicos haitianos son terroristas, pues su expresa intención es infringir terror, pero no solo por un temas financieros, sino que ideológicos.
En una entrevista por parte del youtuber canadiense Christopher Arthur Hughes, dueño del canal Chris Must List al temido “Barbecue”, el mundo pudo conocer su pensar, y entender que el hombre era más que un pandillero, pues tenía una visión país y sus actos estaban motivados por ideales políticos. Su discurso populista pudo atraer simpatizantes de la consigna, pero dicha causa es más oscura, pues el terrorista declaró recientemente que no se rendirá hasta que sean dueños de toda la isla, unas palabras no solo inquietantes, sino que también envía el metamensaje de “somos más que simples delincuentes; tenemos un fin ambicioso y lo conseguiremos sin importar los medios”.
La simetría entre los grupos yihadistas y Califistas –quienes abogan por un califato regional o universal generalmente mediante el terror– y los terroristas haitianos –que abogan por una solo isla con la cultura haitiana, y desde luego, gobernada por ellos– es impresionante, al tiempo que preocupante. deberíamos empezar a acuñar un término que los defina con precisión, pues ya cansa decir bandas Haitianas, y terroristas también, ¿Qué tal Ayisyenistas? “Ayisyen” traducción literal de “haitiano” en creole, e “istas” que es un sufijo griego (aunque empleado en nuestra lengua) utilizado para indicar que alguien o algo es “partidario o seguidor de”, en este caso, los Ayisyenistas son los partidarios de una unificación de la isla con el ligero detalle de un etnocismo de dominicanos y una sociedad bajo el yugo del terror.